Compañeras de sangre
Ángela Lorena y Julia Verónica tienen mucho en común. No solo comparten la misma pasión por el fútbol y la misma posición en el terreno de juego, sino que ambas son hermanas. Una menor que la otra, tanto en estatura, como edad y experiencia en las canchas. Conoce la historia de ambas en el siguiente especial de Nica Futb Femenino.
Ángela Lorena es arquera titular del Deportivo Kol-8. Tiene 25 años, nació el 11 de marzo de 1990 en la comunidad de Ochomogo, Nandaime. Foto: Pablo C. Peñalba.
Establecida
El partido está a punto de iniciar, y la voz que más resuena en la caseta donde se ubica el Deportivo Kol-8 es la de Ángela Lorena. Con su imponente altura se puede notar a leguas que es quién lleva la batuta en el equipo “Colochense”. “Vamos Chicas” “Nosotras podemos”, son frases que Lorena repite una y otra vez con mucha energía, para darle ánimos a sus compañeras.
Ángela Lorena inició su carrera con la UNAN-Managua, luego fue enviada a préstamo con el Deportivo Kol-8. Al final decidió dejar la UNAN-Managua por problemas con el Director Técnico y por encontrarse en la última etapa de su monografía en esta Alma Mater. Fue entonces que decidió integrarse al Caruna R.L, hoy Deportivo Kol-8 y desde ese momento hasta hoy ha sido parte de este equipo, el “equipo de sus amores”. Asegura que su equipo favorito es la “Azul y Blanco”, la Selección Nacional Femenina de Futbol de Nicaragua, donde es arquera suplente en la Selección Mayor.
Lorena es toda una profesional, tanto dentro como fuera del terreno de juego. Siempre vela por la seguridad de las participantes en cada partido, y evita a toda costa cualquier conato de pleito. Además es Lic. en Matemáticas y actualmente imparte clases de matemática general en la Unan-Managua.
Julia Verónica Gutiérrez Sequeira es hermana de Ángela Lorena. Tiene 16 años, nació el 13 de enero del 1999 en la comunidad San Luis de Manares, Nandaime. Foto: Pablo C. Peñalba.
El Softball manda en Nandaime
Las Águilas de León ya están abajo en el marcador, el gol del Deportivo Kol-8 ha llegado en las piernas de Tatiana Ordoñez. Las delanteras del equipo “metropolitano” empieza a asediar el marco de Ángela, quién en par de ocasiones ex exigida al máximo por Sandra Massiel Salazar. Desde la banca, Julia Verónica observa con mucha atención el partido, de principio a fin, seguro intentando aprender de cada buena jugada y cada error de su hermana, Ángela Lorena, quién termina siendo clave en la victoria por la mínima del Kol-8 ante las Águilas de León.
A pesar de interesarse por el fútbol desde los 10 años, Julia Verónica inició su carrera deportiva jugando softball. Sus primeros cuatro años de la secundaria los curso en el Instituto Nacional José Dolores Estrada de Nandaime y fue allí donde dio sus primeros pasos en este deporte.
Según las hermanas Nandaime es un pueblo donde el deporte más practicado por varones es el béisbol, mientras las mujeres aman el Softball. “Mi hermana quería jugar fútbol, pero no encontraba con quién practicarlo” asegura Lorena.
“Siempre me gustó el fútbol, pero como en Nandaime no se práctica, entonces Lorena me preguntó si quería venirme con ella, y así jugar en primera división y tomar experiencia” señala Verónica.
Julia cuenta que un día estando en clases de educación física, se acercó a un grupo de chicas que se encontraban jugando softball en el cuadro del colegio, y decidió jugar de manera amistoso, pues observó que se divertían con esta disciplina. ”Ese día jugué muy bien y el entrenador del equipo me dijo que si quería participar en una liga departamental en Rivas. Y yo no me negué y así empecé jugando softball” dice Julia.
Fue así como Julia formó parte de este equipo, y posteriormente de la representación de Granada en las competencias nacionales, puesto que “La Gran Sultana” no tiene representación en esta disciplina.
En 2014 el conjunto de Softball femenino de Granada, en el cuál militaba Julia Verónica clasificó a los centroamericanos en Guatemala, luego de ganar los escolares. Sin embargo Verónica no realizó el viaje por problemas legales.
El traslado a la capital
Para Verónica, Ángela es su pie de apoyo. “Mi hermana convenció a mi mamá para que me dejará venir a Managua, mi madre no quería, pero ella la logró convencer…Ángela es mi apoyo incondicional”- dice Verónica.
Ángela Lorena asegura que trajo a su hermana a Managua con dos intenciones. La primera que realizará sus estudios finales de secundaria en la Escuela Preparatoria nocturna de la UNAN-Managua, para que se fuese adaptando al ambiente capitalino, pues una de las metas de Verónica es estudiar su carrera en la UNAN y la segunda es el sueño de Verónica de formar parte de la selección SUB-17 de Nicaragua, que se prepara para encarar este año las Eliminatorias Mundialistas de la categoría.
Verónica mira esta experiencia como algo único. “Te hace valorar lo que tienes, te ayuda a seguir con las metras, con los sueños. Aprendes que cada caída solo te hace más fuerte…Es como una aguja en un pajar, siempre lo he dicho, Soy yo contra el mundo”.- comenta Verónica.
Con el pasar del tiempo, Verónica se ha ido acostumbrando a la vida en la capital. Cada mañana debe realizarle el desayuno a su hermana Ángela, quién se va a entrenar con la selección femenina, luego Verónica vuelve a dormir. Posteriormente almuerzan juntas, y Julia realiza sus tareas. “Si son muchas no entreno con Kol-8 en la tarde, si son pocas sí”, señala Verónica. De noche ambas están fuera de casa, pues Julia estudia en la Preparatoria, mientras Ángela da clases de matemáticas.
Julia asegura que las clases son duras, sin embargo señala que cuando está en casa, nunca esta aburrida, pues Ángela siempre la hace reír de cualquier manera. “Me gusta jugar mucho con mi hermana, con ella nunca estoy aburrida. Para pasar el tiempo también escucho música”- indica Verónica.
Compañerismo
Verónica cuenta como es el trato por parte de sus nuevas compañeras de juego, las jugadoras del Deportivo Kol-8. “Es muy bonito, las chicas nos ven y dicen:
-"Que tuani Lore”.
-¿Qué es lo tuani? -pregunta Lorena.
-Que son hermanas y que a las dos les gusta el fútbol y además de eso la misma posición.
En la Universidad los compañeros de Verónica se vuelcan a apoyarla de manera incondicional, inclusive le aprecian por estudiar y jugar fútbol.
“¡Muchos se asombran! Pero siempre lo han tomado bien, dicen que soy inteligente, porque voy bien en clases y además de estudiar tengo tiempo para jugar fútbol. Ellos todos los viernes me desean suerte en el partido de los domingos.”.- asegura Verónica.
Mejor en el futuro
Verónica asegura sentirse feliz, pues Ángela siempre le apoya y le dice: “Yo sé que vos vas a llegar a ser mejor portera que yo”. “Siempre me lo ha dicho”.- recuerda con alegría Verónica.
NF: ¿Qué le respondes?
Verónica: Yo le digo que sí, que algún día seré una muy buena portera. A pesar de que todos los que me han entrenado como portera han criticado mi tamaño, dicen que no tengo estatura para ser portera”
NF: ¿Te preocupan los comentarios?
V: Eso no es algo que me preocupé. Yo sé que llegaré a ser mejor que ella algún día. Con dedicación y esfuerzo lo lograré, y le diré a todas las personas que no confían en mí. “Aquí estoy, triunfe y como portera, a pesar de mi tamaño”.
Según Verónica uno de los profesores que confía en ella es el Profesor Jorge Sánchez. “Él me dice que mi tamaño está perfecto en comparación a mi edad”.
Ángela por su parte señala que le ha insistido a su hermana Verónica, que no juegue en esa posición. «Siempre le insisto, pero ella dice que ahí es donde le gusta, así que ni modo a apoyarla…Dios mediante juegue algunos partidos para que agarre confianza y que se la gane al hacer un buen partido cuando le corresponda. Seguro “Colocho” le dará la oportunidad en algún partido»